Escribo esto a las puertas de las vacaciones (para nosotros, que vamos a destiempo casi siempre). En dos días nos vamos por ahí.
Cuando tú recibas esta newsletter, yo estaré a punto de volver y sabré si hice la maleta casi perfecta (porque siempre queda sitio para la mejora).
Confieso que es un tema que me obsesiona. A parte de ver alguno de los trillones de vídeos que hay en youtube sobre el tema (y que me fascinan aunque casi nunca les hago caso), reconozco que ocupa mucho espacio en mis pensamientos antes de irme de viaje.
Hacer la maleta es rápido generalmente, porque llevo días empaquetando todo mentalmente. Pero escoger mentalmente qué meto es otra cosa. Además, siempre me surge alguna duda al cerrar la mochila, ¿y si añado/quito esto o lo otro?
Odio llevar cosas de más. Si peco de algo es de pasarme de austera, incluso teniendo sitio suficiente. Me quiero llevar todos los favoritos de mi armario, que es casi todo (señal de que me gusta lo que tengo, cosa buena pero poco práctica), y a la vez no soporto pensar que llevo algo que no voy a utilizar.
Y por supuesto, tampoco olvidarme nada que vaya a necesitar (la teoría de que si te falta algo ya lo comprarás me da pesadillas).
A pesar de todo esto, me encanta hacer la maleta. Pensar en las combinaciones mínimas necesarias para todas las circunstancias y ocasiones. Como completar el puzle.
Veremos si esta vez lo consigo. Por ahora el parte meteorológico combina lluvia (un clásico viajemos dónde viajemos) y sol, temperatura entre primaveral y veraniega, ciudad cosmopolita y quizás alguna piscina. Todo un reto.
En esta casa hay dos enfoques muy distintos al preparar el equipaje: yo, que busco el equilibrio ideal entre minimalismo y maximalismo; Daniel que le dedica cero pensamientos más allá del rato que abre el armario y coloca las cosas en la maleta (sin mirar las posibles mejores combinaciones para horror de una servidora). ¿Pueden convivir las dos aproximaciones? Pues de momento creo que lo mejor es empaquetar por turnos ;-)
En este episodio del Hotel Jorge Juan con las hermanas Zubi tocan un poco el tema de la maleta ideal, y me gustaría tanto un especial sobre eso! igualmente la charla es muy interesante y agradable de escuchar.
Muchos vídeos sobre equipaje hablan del “travel capsule” (algo como el armario cápsula de viaje), o sea, empaquetar de manera que todo pegue con todo para multiplicar opciones.
Sobre este tema, me gustó el episodio de Mañana empiezo sobre vestir con menos. Un par de pensamientos que me interesaron especialmente:
¿Por qué te pones lo que te pones? Buscar el mínimo común denominador en tu vestimenta para afinar tu “estilo”.
¿Quién era yo entonces (cuando usaba esa ropa)? ver tu ropa como una herramienta de autobiografía. Nunca me lo había planteado así.
Si le diera importancia a llevar la ropa sin arrugas (que no es el caso) supongo que debería tenerlo en cuenta al hacer la maleta. Aunque el título sea Contra planchar, no dejes que te asuste, este episodio de Arsénico Caviar habla de mucho más. Aunque tengo mis dudas con Arsénico Caviar (hay cosas muy interesantes pero también muy cansinas), este episodio me ha gustado.
Si viajas en avión, el tamaño de la maleta se vuelve un tema principal. Ahí sí que tienes que afinar con el equipaje. Estos días pensaba en la gente que tiene miedo a volar, que no son pocos. Yo tengo otros miedos y me puedo imaginar el mal rato que puede llegar a ser un vuelo aunque sea corto, o entiendo incluso evitar coger un avión. Y si viajas en coche, el miedo a conducir es todo un problema (hola amigas del club de las que tenemos carnet pero no conducimos, sé que no estoy sola…)
Recientemente he escuchado estos dos capítulos, muy diferentes entre ellos, pero que pueden ayudar. A mí me han dado un empujoncito.
Antes siempre aprovechaba los viajes para leer (aunque ahora escuchar podcast le hace la competencia). Si eres de las que no duerme en los trayectos de avión o tren, qué mejor oportunidad para leer un buen rato seguido esa novela a la que le tienes tantas ganas.
En este Saldremos mejores entrevistan a la autora Alana S. Portero y me han entrado una ganas locas de correr a leer su libro La mala costumbre , aunque no va a pasar porque tengo una cola de libros que da miedo.
Y si quieres más recomendaciones, me ha parecido muy interesante el especial de No es el fin del mundo sobre los libros que han cambiado el mundo, por si te faltaban ideas de lectura.
PD: escuchar podcast me crea una necesidad imperiosa de leer y a la vez me quita tiempo de lectura; tiene mal arreglo la cosa…
Hacer la maleta tiene parte de tetris (como rellenar el lavavajillas o poner el equipaje en el coche). Para celebrar que ha llegado ya la temporada de lago y cámping, nada mejor que ver mi virtuosismo en el tetris del equipaje con el vídeo que hicimos enseñando nuestro set de cámping.
Siempre hay sitio para el postre
El próximo 27 de junio estaré en Sinapsis cámara en mano, haciendo fotos y vídeos, y escuchando muuuy atentamente a Vivian Birn y Mariawolle. hablando sobre (peri)Menopausia. Si estás en Berlín te lo recomiendo muchísimo!!
Mi maleta va a ser un mix de sandalias y chubasquero, vestido de verano y jersey. Siempre me dejo el paraguas porque pienso que con el chubasquero me basta y me sobra. ¿Será suficiente?